Cuando buscamos asegurar un riesgo de nuestra vida, éste debe reunir siete características, ya que, de lo contrario, se considerarán exclusiones.
El acrónimo “LIFE-PAC” nos ayuda a recordar las siete características del riesgo asegurable:
Lícito
El riesgo lícito no debería ir en contra de la legislación, reglas morales, ni en perjuicio de terceros, ya que la póliza sería nula automáticamente.
Ejemplo: Una persona que sufre lesiones en una riña provocada por él mismo, no recibirá el pago de sus gastos médicos en su seguro por tratarse de un acontecimiento ilícito.
Incierto
El riesgo incierto es cuando no se tiene certeza si va a ocurrir o no, ni tampoco cuando pueda presentarse.
Ejemplo: El único riesgo cuya certeza se tiene es el de la muerte, pero existe la incertidumbre de cuándo pueda ocurrir. Otro ejemplo puede ser la aparición de una nueva enfermedad o condición médica para la cual no existe un tratamiento conocido en el momento de emitir la póliza de seguro.
Fortuito
El riesgo fortuito debe ser inesperado e imprevisible. Debe provenir de un acto o acontecimiento ajeno a la voluntad humana.
Ejemplo: Los accidentes, por definición, son ajenos a la voluntad humana.
Económico
El riesgo debe tener contenido económico. En otras palabras, es la cantidad de pérdida máxima que una persona está dispuesta a asumir y que la compañía de seguros está dispuesta a cubrir. Es el valor financiero del riesgo que está siendo transferido a la compañía de seguros.
La relación del riesgo debe producir una pérdida económica que despierte la necesidad de restituirlo.
Ejemplo: En una familia, la pérdida del jefe de familia hará que se sufra de un desequilibrio económico que se podrá resarcir a través del seguro.
Posible
El riesgo debe tener la posibilidad de que suceda en la realidad. Evidentemente no tiene ningún sentido asegurarse contra riesgos imposibles.
Ejemplo: Una persona que se encuentra en el valle de Toluca, sabe que es imposible tener el riesgo de padecer los efectos de un Tsunami, ya que no se tienen registros de que algo así haya ocurrido.
Aleatorio
El riesgo es al azar, o sea, que a cualquiera le puede ocurrir. Es un principio básico de los contratos de seguro.
Ejemplo: Un accidente a cualquier persona le puede ocurrir, sin importar su edad, sexo, posición económica, ubicación geográfica, etc.
Concreto u objetivo
El riesgo debe poderse valorar de manera concreta y objetiva por la Aseguradora en dos aspectos:
Cualitativamente: Que el objeto asegurado se pueda describir en cuanto a sus características.
Cuantitativamente: Que sea medible y por lo tanto tasable. Que existan estadísticas confiables para poder establecer el costo del seguro.
Ejemplo: La tabla de mortalidad es una estadística que mide el riesgo de morir a determinada edad. Es una estadística confiable, por lo que podemos tarificar.
Ejemplo: Persona de 35 años, mujer, profesionista.
Por todo lo anterior, en Enríquez Lujambio Asesores te acompañamos durante el llenado de tu Solicitud, buscando que en todo momento se reflejen a través de tus respuestas estas características del riesgo asegurable, y de ser posible, puedas lograr con éxito que Seguros Monterrey New York Life acepte toda la cobertura de seguros que estás solicitando.
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